Llegamos al derbi tras haber
conseguido ganar el último e importante partido a corazonistas afianzando
nuestro liderazgo del grupo. Venimos a jugar un partido importante cuya
victoria aseguraría el primer puesto de forma matemática contra un rival por
todos conocidos.
Empezamos con unos primeros
minutos de cuarto muy sólidos tanto en ataque como en defensa que nos permiten
marcar un primer parcial a favor importante llegando a las dos cifras de
diferencia en el marcador rápidamente. Debido al gran momento de los nuestros,
el rival pide un tiempo muerto para parar la línea por la que se desentraña el
partido y no podría haberse conseguido unos mejores resultados. De repente, el
rival es capaz de pararnos en defensa a la perfección, nuestro ataque se
encuentra trabado y nuestra defensa no mitiga sus envites por lo que pronto se
reduce esa primera diferencia de 10 puntos y se iguala el partido.
Los siguientes cuartos son un
eterno toma y daca entre ambos equipos que cambian varias veces de forma de
atacar o de defender con el fin de subsanar las deficiencias que se presentan
en el campo. La zona nos hace mucho daño durante todo el partido y nos presenta
serias dificultades para atacarla, sin embargo, destellos de luz en momentos
claves, con jugadas acertadas de los nuestros nos permiten mantenernos en el
marcador y disputar un partido en el que el ritmo es marcado por el rival. En
el otro lado del campo, a pesar de fallos claros en algunos ajustes defensivos,
momentos de gran intensidad del equipo nos permiten correr y eliminar el
peligro de los ataques rivales consiguen también puntos a nuestro favor y
evitan muchos de los suyos.
Tras un bonito partido de lucha
encarnizada entre ambos equipos se llega al final del partido con un marcador
ajustado, pero que favorece al rival. Un gran último minuto de intensidad
defensiva máxima y decisiones correctas ofensivas nos permiten afrontar las
últimas posesiones con posibilidades de llevarnos la victoria y disponer del
último ataque con un solo punto abajo a falta de 2 segundos. Entonces se
produce uno de esos pequeños pero grandes regalos que te da la vida y el
baloncesto concretamente; y tras una jugada de fondo marcada por los propios
jugadores en pizarra se consigue una posición de tiro de tres desde la que
levantarse y enchufarla. Victoria en el último segundo tras un partido precioso
en el que cualquiera podría habérsela llevado. Y en esos momentos en los que el
balón está en el aire justo antes de que se escuche el “choff” previo a la
alegría cabe reflexionar sobre la justicia poética que permite que un equipo
vea recompensado el gran trabajo realizado hasta el momento durante toda la temporada
y años anteriores y llegue a consolidar el primer puesto de forma matemática de
una manera tan especial y ante un rival tan duro.
El resultado:
MARIANISTAS AMORÓS - 81 * SANTA MARÍA DEL PILAR - 79
Ahora toca seguir trabajando,
mejorar más y más para afrontar la siguiente fase y todo lo que quede por
llegar de manera óptima.
Seguir sumando #mirarhaciadelante #másmásmássiempremás
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