Hoy la crónica nos la ofrece Diego:
Este era el primer partido de la segunda vuelta, contra un equipo fuerte, Móstoles. Jugábamos fuera de casa, pero esto no nos intimidaba.
Este era el primer partido de la segunda vuelta, contra un equipo fuerte, Móstoles. Jugábamos fuera de casa, pero esto no nos intimidaba.
Empezamos con una presión de salto y cambio, en la que hubo muchos despistes y que les dejaron canastas fáciles, llegándose a poner 17 arriba en el primer cuarto. Esto nos hizo cambiar de defensa a zona. Esta defensa nos salió mejor, pero debido a una jugada estratégica suya, seguían entrando fácilmente hasta que empezamos a cortar pases y a no permitir muchos cortes a canasta.
En cuanto al ataque, fue mucho más organizado que otros partidos, jugamos en cinco abiertos, pase y corto y salió bastante bien. Nos fuimos al descanso con un 50-25, perdiendo, pero habiendo corrido y peleado.
El tercer cuarto fue planteado de otra manera, nosotros peleábamos igual de bien y defendíamos con ganas, pero ellos empezaron a meter triples y eso les distanció bastante en el marcador, fallábamos canastas fáciles, pero no nos rendimos.
El último cuarto no fue muy diferente, ellos acertaban en el tiro y nosotros corríamos contrataques (alguno muy bonito), pero empezaron a presionar, metieron muchas canastas al robarnos la pelota en nuestro campo de defensa.
El resultado:
CIUDAD DE MÓSTOLES - 100 * MARIANISTAS AMORÓS - 49
Perdimos, pero vamos por el camino correcto. Este es un claro ejemplo de que aunque jugando bien, puedes perder